Si Freud levantara la cabeza...

Si Freud levantara la cabeza, se volvía a morir...

En los últimos días me han llegado varias "noticias" que, perdonadme, no puedo dejar pasar sin pronunciarme... Y tienen que ver con la caca. Sí, la caca o heces, deposiciones, excrementos,  chuscos, popo, truños, mierdas, defecaciones, chufos, boñigas, evacuaciones, deyecciones, detritos, zurullos, mojones, cagarrutas, muñecos de barro... ¿Sabíais que existían tantos nombres para esos deshechos que nos salen por el culín? ¡Yo no! jajaja...

Antes de entrar en materia, dejadme que os hable de Freud.

Freud fue un psicólogo austríaco, padre del psicoanálisis e importantísimo, ¿quién no conoce a Freud? Bien, pues, en mi opinión, era alguien a quién se le fue tremendamente la olla, aunque, como suele ocurrir, en medio de la locura acertó a teorizar algunas cosas que parecen ser verdad (dicho esto por alguien que piensa que a muchas personas les va bien este tipo de terapia, pero que no comparte la mayoría de sus postulados, y desde el respeto a esta corriente teórica y a quiénes la practican). Pero para mí, Freud era un enfermo, que estaba obsesionado con el tema de la sexualidad.

Y en esto que un día se ve que se puso él allí, en su diván, a pensar... y elaboró la teoría del desarrollo psicosexual, según la cual, todos los niños son perversos por naturaleza, porque encuentran placer en cualquier objeto (se conoce que van masturbándose por ahí a cada momento), (¡uy! se me olvidaba que este blog también lo leen mis hijos... niños, ¡¡pasad de post!!) y entonces, decía Freud que esos niños deben pasar por 5 etapas para convertirse en adultos con una sexualidad plena y madura. Si se quedan fijados, esto es, estancados, en alguna de esas etapas, aparece el conflicto o la patología.

A la primera etapa la llamó la etapa oral (del nacimiento a los 12-18 meses de edad). En esta etapa, al bebé le molan las cosas que pasan en su boca, como la succión y la alimentación. Cuando un adulto se ha quedado fijado en esta etapa puede estar demasiado interesado en las cosas orales, como comer, beber, hablar, fumar... En la patología, pueden aparecer el alcoholismo, los trastornos de la alimentación, las adicciones...

La segunda es la etapa anal (de los 12 meses a los 3 años). Aquí, el niño disfruta reteniendo y expulsando la caca. La zona de gratificación es la región anal y la actividad más importante es el control de esfínteres. Una adulto fijado en esta etapa es rígido, tacaño, posesivo o por el contrario desordenado e irresponsable (esto no sé si va en función de si va estreñido o si tiene diarreas...). En la patología, tendríamos los trastornos y personalidades obsesivas.

En la tercera etapa, la fálica (de los 3 a los 6 años) es cuando llegamos al meollo. La fuente principal de placer son los genitales y el acariciarlos. En los nenes se desarrolla el complejo de Edipo, es decir,  se enamoran inconscientemente de sus madres. Las nenas, por su parte, tienen complejo de Electra, es decir, se mueren por tener un pene (¿os acordáis cuando os he dicho que se le había ido la olla?).

La etapa de latencia, (de los 6 años hasta la pubertad), es una época de calma relativa entre etapas más agitadas. Que digo yo, los que se queden fijados aquí, ¿qué pasa? ¿se hacen curas, monjas...? ¿son eunucos? ¿frígidos? ¿se tocan a la vez boca, ano y genitales? No sé, es un misterio para mí.

Por último, la etapa genital (de la pubertad hasta la edad adulta) es cuando los chavales y chavalas se convierten en personas capaces de amar y trabajar. No sé qué tendrá que ver la relación entre ambos verbos, pero Freud así lo estipuló (manda huevos que para ser adultos sexualmente maduros nos tengamos que quedar fijados en la etapa del trabajo, ¿no? Hummm... no me convence). Decía que aquí surgen los deseos sexuales y los agresivos. Porque claro, los niños menores de 12 o 13 años no tienen instintos agresivos nunca... ¿a qué no?

Bueno, pues nada. ¿Habéis entendido algo? jajajaja... Y diréis, ¿por qué nos cuenta todo esto? Pues el tema es que se ve que los cerebros privilegiados para la iniciativa y la creatividad han dirigido sus esfuerzos a crear cápsulas que, si te las tomas, cagas purpurina; otras, para cagar oro, al módico precio de casi 500 €/cápsula; moldes para que la caquita salga con formas divertidas, de estrellas, corazones...; moldes para hacer bombones con la forma de tu ano...

Y cuando leo estas cosas pienso: a) no son verdad, o b) el mundo está fatal.

Y establezco la siguiente fórmula:  Si a) es verdadero, a) es igual a b).

                                                         Si a) es falso, a) es igual a b).

Porque vamos a ver... si alguien se inventa estas cosas y son mentira, está fatal de la muerte. Y si alguien inventa de verdad estas cosas, está fatal de la muerte. Y si alguien las compraaaaa..... No sé cuál de las opciones me parece peor...

Cápsulas para cagar purpurina... osea, te lo juro por Dior, me megahago popo, pero yo, divina de la muerte... ¿Que alguien ha pensado en la señora de la limpieza? Esa purpurina, cuando se mezcle con el agua de la cisterna...

Y si eres ruso, lo tuyo son las cápsulas para cagar oro, en tu WC de oro, con tu papel higiénico de pan de oro. Que luego se te debe quedar el culo amarillo y te van a confundir con chino, en vez de ruso... Pero bueno, allá tú.

Moldes para hacer formas con tu caquita. Para niños. ¿Para qué? ¿Para que lo ponga en una bandeja y se lo regale a papá, mamá, los abuelitos...? ¿Para que lo lleve al cole? ¿Lo ponga en la estantería de su habitación? ¿Para que lo use como plastilina? Revisaré los componentes de las cajas de Play-Doh...

Y el campeón: moldes para hacer bombones con la forma de tu ano. A ver, maridín, que estoy esperando en candeletes que llegue el próximo San Valentín... ¿qué mejor regalo que una cajita mona de bombones con la forma de tu tracto final? Eso sí, por favor, que no sean rellenos.

Ay por favor... Que nada, pues que entonces pienso que hay muuuucha gente que se quedó en la etapa anal... Porque además, también he leído recientemente que es tendencia el annilingus... (niños, ¡he dicho que esto no se lee!) que ha existido de toda la vida, pero que ahora ya se ve bien, y es trendy practicarlo...

Y me digo... ¡qué fijación con el ano! Buscando información por Internet me topo con un post en el que te enseñan hasta 100 maneras diferentes para decir que vas al baño... y un lugar llamado Frikipedia, que le dedica un artículo a la caca digno de lectura...

Total, que, si Freud levantara la cabeza y viera la de pervertidos que nos hemos quedado dándonos gustirrinín en el anus, tenía un orgasmo tan bestia que la volvía a palmar...